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Retribución flexible ¿Qué es y por qué la necesitas?
Uno de los grandes desafíos que enfrentan las empresas es la perdida de trabajadores valiosos por parte de competidores que los atraen, no siempre por ofrecer un mejor salario, sino un mejor sistema de compensaciones. En este contexto, la retribución flexible es la estrella de la función.
¿Qué es la retribución flexible?
La retribución flexible es una modalidad voluntaria de remuneración en la que la empresa ofrece al empleado la posibilidad de destinar una parte de su salario bruto anual a la compra o contratación de determinados productos o servicios ofrecidos a través de la empresa, a un coste inferior al de mercado.
La retribución flexible es un beneficio para el trabajador, que puede mejorar el rendimiento de su salario, y para la empresa, que puede ofrecerlo a sus empleados, aumentar su fidelización laboral, y todo sin necesidad de invertir dinero ni aumentar sus costes fijos.
¿Cómo se regula la retribución flexible en España?
En España, la retribución flexible está regulada principalmente por la ley 35 2006, del Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas.
En esta ley, que se refiere a las retribuciones flexibles como «renta en especie», se establece que la cantidad del salario bruto anual de un empleado que se puede destinar a un plan de retribución flexible está limitada al 30%.
Es decir que, por ejemplo, si el salario bruto anual de un trabajador es de 60.000 euros, se pueden destinar únicamente 18.000 euros a la compra de productos o contratación de servicios bajo la modalidad de retribución flexible.
Otra disposición importante de recordar es que bajo ningún concepto puede la empresa imponer un plan de retribución flexible a un empleado, sino que este siempre es opcional.
La retribución flexible en la práctica
Las empresas ofrecen esta modalidad de retribución a sus empleados como una manera de mejorar el rendimiento de su salario sin aumentar sus propios costes.
A pesar de que hoy en día sigue siendo una ventaja diferenciadora, es esperable que termine por convertirse en un estándar, a medida que más y más trabajadores disfrutan de este beneficio.
Si bien es cierto que ofrecer la opción de recibir una retribución flexible no implica un coste para la empresa, sí que es necesario montar, y administrar, el plan de retribución flexible.
Cómo montar y administrar un plan de retribución flexible en una empresa
Montar y administrar un plan de retribución flexible es un trabajo del que se encarga el área de recursos humanos de la empresa.
Los pasos a seguir para montar un plan de retribución flexible en una empresa son:
- Definición de las necesidades y preferencias de los empleados.
- Diseño del plan de retribución flexible.
- Implementación en la empresa.
- Administración del plan retribución flexible.
Definición de necesidades y preferencias
En esta etapa inicial es fundamental la comunicación entre el área de recursos humanos y los trabajadores que van a disfrutar de la retribución flexible.
El objetivo es definir qué productos y servicios serán más relevantes para ellos, teniendo en cuenta tanto las generalidades de los trabajadores como la idiosincrasia de la empresa.
Por ejemplo, en una empresa que presta servicios de diseño web, en la que los empleados son en su mayoría jóvenes de entre 20 y 30 años, sin hijos, no tendría tanto sentido ofrecer cheques de guardería; pero sí una suscripción a una cadena de gimnasios, o cheques de restaurantes (más adelante veremos cuáles son los servicios más comunes en los planes de retribución flexible).
Diseño del plan de retribución flexible
Ya definidos los productos y servicios que se incluirán en el plan de la empresa, lo que sigue es diseñarlo.
Esta es quizás la etapa más engorrosa: consiste en buscar a las empresas que prestarán los servicios o proveerán los productos, comparar precios y prestaciones, y realizar las contrataciones.
Implementación de la retribución flexible en la empresa
Cuando el plan está listo, es el momento de implementarlo en la empresa.
Preséntalo a los empleados de manera que se comprenda lo más claro posible cuáles son las ventajas impositivas de optar por este tipo de remuneración flexible.
Esto es fundamental, ya que para muchos trabajadores puede resultar chocante considerar que van a percibir menos dinero al final del mes.
Es importante explicarles claramente por qué, al final, saldrán ganando.
Administración del plan de retribución flexible
Lo que queda es el día a día en la empresa.
Una vez que los trabajadores opten por la retribución flexible, solo queda encargarse de las contrataciones y los pagos de los servicios.
El rol de la automatización en las empresas
Hasta hace poco, todo el proceso que acabamos de detallar era la principal razón por la que las empresas pequeñas y medianas se mantenían reticentes de ofrecer planes de retribución flexible: por no contar con el personal necesario para montarlos y administrarlos.
Todo eso está cambiando, rápidamente, con el avance de la automatización en las empresas.
Hoy en día, puedes contratar un servicio que automatice tanto el montaje como la administración de estos planes, reduciendo en gran medida la carga de trabajo del área de recursos humanos.
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La retribución flexible no es un beneficio social
Ni tampoco es lo mismo que salario en especie o retribución en especie; como veremos.
En realidad, tanto la retribución flexible como los beneficios sociales son modalidades de salario en especie, formas retributivas no dinerarias.
La principal diferencia entre retribución flexible y beneficio social es que los beneficios sociales son prestaciones pagadas por la empresa (no deducidas de una parte del salario del empleado) como parte de su propia política de fidelización de talento o por determinación de un convenio colectivo.
A su vez, los beneficios sociales no son personalizados. A diferencia de las retribuciones flexibles, los empleados no eligen cuáles prefieren disfrutar y cuáles no.
Las retribuciones más comunes en las empresas
¿Qué productos y servicios suelen ofrecer las empresas en sus planes de retribución flexible?
Si bien no hay límites en este sentido (es decir, que pueden ofrecer prácticamente cualquier servicio), sí que hay una serie de productos y servicios que se suelen incluir en este tipo de planes.
Cómo ya hemos dicho, los productos y servicios que se incluyan en un plan de retribución flexible son aquellos que sean más relevantes o atractivos para los empleados de la empresa (que los pagarán con parte de su salario) y, a su vez, coincidan con la idiosincrasia de esta.
Las retribuciones que más suelen incluir las empresas en sus planes son:
- Comidas en restaurantes.
- Transporte público.
- Planes de pensiones.
- Formación.
- Guardería.
- Seguro médico.
Comidas en restaurantes
Esta es la retribución más común, la que ofrece la gran mayoría de las empresas.
Se trata de tickets o vales para utilizar en restaurantes por un valor máximo de 11 euros por día laborable o 220 euros al mes, exentos de IRPF.
Transporte público
Esta retribución abarata en gran medida los gastos en transporte público por parte de los empleados que se desplazan al trabajo en autobús, metro o tranvía.
A su vez, sirve para promover en los empleados el uso de transporte público en lugar de coches, reduciendo el tráfico y la contaminación, y los gastos (y, muchas veces, dolores de cabeza) de aparcar en la ciudad.
En este caso, el límite de la prestación es de 136,36 euros al mes o 1.500 euros al año.
Planes de pensiones
El caso de los planes de pensiones como parte del modelo de retribución flexible es muy interesante: en el corto plazo, el empleado no percibe ningún beneficio a cambio de que se reduzca su salario; en cambio, estará realizando aportes exentos de IRPF a su plan de pensiones.
Planes de formación
Los planes y cursos de formación profesional son una gran oportunidad tanto para el empleado que recibe el beneficio, como para la empresa que lo ofrece.
Por un lado, el empleado tiene la posibilidad de seguir formándose profesionalmente aprovechando la posibilidad de pagar cursos y capacitaciones exentos de IRPF; por el otro, la empresa ofrece la retribución y promueve la capacitación y el crecimiento profesional de sus empleados.
Lo mejor es que esta retribución no tiene límites mensuales ni anuales (más allá de el del 30% del salario bruto anual de cada empleado, claro).
Guardería
Otra prestación que no tiene límites son los tickets de guardería, otra de las preferidas por las empresas con planes de retribución flexible.
En especial, porque ayuda a mejorar la conciliación entre la vida personal y la vida laboral de los empleados con hijos pequeños.
Seguro médico
Esta prestación es la más común, ofrecida por la gran mayoría de las empresas, ya sea como uno de sus beneficios sociales (asumiendo el coste) o como retribución flexible.
La particularidad de esta retribución exenta de IRPF es que es extensible a la familia directa del empleado, aunque el límite anual de la deducción es de 500 euros.
- Programación de turnos
- Control horario
- Gestión de las vacaciones
- Cálculo automático de la nómina
- Análisis de datos e informes
Las ventajas de la retribución flexible para la empresa
¿Por qué debería una empresa invertir tiempo y esfuerzo en montar y administrar un sistema de retribución flexible?
Si bien ya hemos enumerado algunas de las ventajas de las retribuciones flexibles para la empresa, como la fidelización laboral de sus empleados y la consecuente retención de talento, hay más ventajas que vale la pena considerar.
Estas son las principales ventajas de la retribución flexible para la empresa:
- Atraer y retener talento.
- Bajo, o nulo, coste de inversión.
- Es un beneficio «a la carta».
- Mejora la conciliación laboral.
- Aumenta la productividad y el compromiso.
- Beneficia al branding de la empresa.
Atraer y retener talento
Es una manera de fidelizar a los empleados de valor y, a su vez, atraer a nuevos empleados que puedan aportar valor a la empresa.
Bajo, o nulo, coste de inversión
El único coste en el que incurre la empresa es el tiempo que debe dedicar el área de recursos humanos al montaje y la administración del modelo de retribución flexible o, en todo caso, a la contratación del sistema de automatización de retribuciones.
Es un beneficio «a la carta»
Cada empresa diseña su propio sistema de retribución flexible, seleccionando qué retribución ofrecer a sus empleados, así como las empresas que contrata para prestar los beneficios.
Mejora la conciliación laboral
El balance entre la vida personal y el trabajo es una de las principales preocupaciones de los empleados en la actualidad.
Aumenta la productividad y el compromiso
Este tipo de beneficios ayuda a mejorar la relación de los empleados con la empresa, lo que suele traducirse en un aumento de la productividad.
Beneficia al branding de la empresa
Al ofrecer determinados beneficios se pueden promover comportamientos y consumos responsables por parte de los trabajadores, como el uso del transporte público, por ejemplo.
Las ventajas de la retribución flexible para el empleado
En el caso del empleado es más simple.
La retribución flexible permite al empleado aprovechar mejor su salario, aumentando sus rendimientos financieros.
Las ventajas de la retribución flexible para un empleado son:
- Mayor rendimiento del salario
- Es opcional.
- El empleado tiene el control.
Mayor rendimiento del salario
Al tener la posibilidad de dedicar parte de su salario a la contratación de servicios y la compra de productos exentos de IRPF.
La retribución flexible es opcional
Los empleados tienen la posibilidad de elegir si aprovechan o no el modelo de retribución flexible de la empresa.
El empleado tiene el control
Además de elegir si aprovecharlas o no, cada empleado puede elegir a qué beneficios en particular prefiere dedicar parte de su salario.
La retribución flexible, en definitiva, permite al empleado optimizar financieramente parte de su salario a través de un sistema de beneficios que no implica un coste fijo para la empresa y, a cambio, mejora la fidelización laboral de los trabajadores, la productividad y la conciliación.
Es, claramente, una gran idea.
