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Una empresa tiene que asegurarse los mejores trabajadores en cada puesto de trabajo. Para poder seleccionarlos ha de evaluar que sus competencias laborales sean las más adecuadas para las funciones y actividades que van a desempeñar.
¿Qué son las competencias laborales?
Las competencias laborales son el conjunto de habilidades, destrezas, aptitudes y actitudes que debe reunir un trabajador para ocupar un puesto de trabajo.
Es labor de los responsables de Recursos humanos garantizar que cada trabajador de la empresa tiene las competencias laborales adecuadas y que cada candidato tiene también la capacidad y la competencia necesaria para realizar las actividades que se le van a encomendar dentro de la organización.
No hay que olvidar que las competencias laborales van más allá de los conocimientos técnicos o la capacidad profesional y hacen referencia también a las actitudes y aptitudes personales, el perfil humano y la capacidad del trabajador para integrarse en la organización de las empresas.
Desde Recursos humanos se deben evaluar las competencias laborales que tiene cada trabajador y desarrollar el proceso de aprendizaje que sea necesario para que sean mayores o más ajustadas a las necesidades de las empresas en el futuro.
Tipos de competencias laborales
Podemos distinguir cuatro tipo de competencias laborales:
Competencias básicas
Dentro de este ámbito entrarían las competencias laborales que se consiguen con una educación básica. Se trataría de conocimientos muy generales y competencias sociales conocidas por todos.
Competencias técnicas para el desarrollo de actividades concretas
Estas competencias laborales hacen referencia a los conocimientos específicos que son necesarios para llevar a cabo un trabajo. Muchos trabajos requieren competencias técnicas concretas que es necesario conocer para poder llevarlos a cabo con efectividad.
Competencias transversales
Se trata de competencias como la creatividad o la proactividad. Competencias laborales que se pueden dar en muchas personas, pero no en todas como se supone en el caso de las básicas, y que ayudan a realizar cualquier tipo de trabajo en una empresa.
Competencias de liderazgo
Son las capacidades laborales que puedan presentar los trabajadores de las empresas para la conducción de un equipo dentro de la organización.
Competencias más demandadas en las empresas
Habilidad para tomar decisiones
No es una competencia laboral exclusiva de los directivos. La capacidad para tomar decisiones es muy valorada en las empresas que buscan trabajadores que sepan elegir bien cuando hay diferentes opciones, especialmente en momentos críticos.
Dentro de la competencia para tomar decisiones es importante saber cuándo hay que recurrir a los mandos superiores o cuando una decisión debe ser tomada por uno mismo dentro de su propio ámbito.
La toma de decisiones adquiere una mayor relevancia en función del tipo de la empresa y de la autonomía creativa que tengan sus empleados. Cuanto mayor sea la autonomía, más importante es tomar la decisión correcta.
Trabajo en equipo
En un momento en el que las empresas necesitan una interconexión estrecha y constante entre sus empleados, trabajar en equipo es una de las competencias laborales con más demanda.
Trabajar en equipo es una competencia laboral exigible a los trabajadores de la empresa, pero imprescindible, sobre todo, para cualquier candidato porque debe encajar perfectamente con el equipo y la organización ya existente.
- Programación de turnos
- Control horario
- Gestión de las vacaciones
- Cálculo automático de la nómina
- Análisis de datos e informes
Capacidad de aprendizaje
La capacidad de aprendizaje es uno de los aspectos que más se tiene en cuenta por parte de Recursos humanos cuando se trata de valorar las competencias profesionales. Un candidato a entrar en una empresa debe tener capacidad de aprendizaje y las aptitudes necesarias para integrar nuevas habilidades y la información que le trasladan sus compañeros y superiores para mejorar su perfil profesional.
En este aspecto, es muy importante que la facilidad para absorber nuevos conocimientos y habilidades venga acompañada de un plan de formación por parte de la empresa que dé respuesta a la predisposición de las personas por mejorar en su trabajo.
Iniciativa y creatividad
Son dos competencias que son muy valoradas por la empresa, pero que, en ocasiones, son difíciles de canalizar. Hasta donde puede llegar la iniciativa personal sin complicar la organización es muy complicado de medir y crear los cauces para que la creatividad pueda expresarse en el seno de una empresa no siempre es una tarea sencilla.
Los empleados o el candidato que tienen estas competencias laborales y son capaces de gestionarlas y expresarlas adecuadamente son extraordinariamente valorados. Dentro de los tipos de competencias laborales es la que está más vinculada con la motivación del propio trabajador.
Resiliencia
Es una de las competencias laborales clave en el personal de la empresa. Los empleados deben ser capaces de adaptarse a los cambios constantes del entorno económico y tener habilidades y flexibilidad suficiente para aportar alternativas ante los problemas que surgen o los cambios que experimenta la propia empresa.
Las personas de la empresa han de tener competencias profesionales y personales suficientes para no venirse abajo ante los inconvenientes y ser capaces de superarlos y empezar a trabajar de nuevo en soluciones distintas.
Orientación al cliente
Los clientes deben ser la primera preocupación de un profesional de una empresa que busque la máxima productividad. Es una de las habilidades imprescindibles en el trabajo para poder conseguir buenos resultados.
Responsabilidad
Es una de las competencias laborales más exigidas. Se puede entender desde un punto de vista más básico para cumplir con las normas generales en el entorno del trabajo, pero es también una habilidad o aptitud que está muy vinculada con el compromiso con la empresa y la voluntad de dar lo mejor de uno mismo en cada momento o situación dentro del proceso de producción.
También hay que considerarla como responsabilidad hacia el resto del equipo y los compañeros de trabajo para compartir información o ayudar en las labores o tareas que puedan llevar a cabo en su trabajo.
Comunicación
Las habilidades de comunicación son también competencias laborales muy solicitadas. Se trata de comunicación entendida desde un punto de vista de 360º: con los clientes, los compañeros y los superiores.
La capacidad profesional de transmitir información es importante, pero debe estar acompañada de una escucha activa que permita entender los datos que nos trasladan otras personas y sacar de ellos el máximo rendimiento. Es una de las competencias imprescindibles para triunfar en el mercado laboral.
Organización
Muy vinculada al trabajo en equipo, la organización personal y profesional es necesaria para estructurar los recursos disponibles y, sobre todo, para priorizar tareas y establecer objetivos a corto y medio plazo para alcanzar las metas para el futuro.
Pensamiento crítico
Es una de las habilidades a las que se le concede menos importancia, pero que cada vez es más demandada. Es muy beneficioso para la organización que cada persona que la integra se plantee si los procesos son los adecuados y aporte las posibles mejoras o alternativas que puedan ayudar a mejorarlos.
El pensamiento crítico unido a la creatividad permite abrir nuevos caminos.
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Evaluación de las competencias laborales
Para evaluar las competencias laborales hay muchos sistemas entre los que destaca la evaluación de desempeño de 360º, aunque también se puede hacer a través de encuestas o entrevistas. Un software de personal también ayuda a conocer qué competencias laborales se pueden encontrar en el personal de la entidad.
