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Condiciones de trabajo, o cómo mejorar la vida del trabajador (y evitar la fuga de talentos)
Vivimos épocas de grandes cambios en cuanto a condiciones de trabajo. La pandemia de Covid aceleró la transición digital de las empresas y el enfoque de los trabajadores está cada vez más puesto en el balance saludable entre el trabajo y el ocio.
En este contexto, las condiciones de trabajo son el factor determinante del éxito, o del fracaso, de la mayoría de las empresas.
¿Qué son las condiciones de trabajo?
Las condiciones de trabajo son todos los aspectos de la vida en la empresa y de la relación de cada trabajador con su lugar de trabajo, desde su salario y su jornada laboral, hasta los beneficios sociales y los riesgos asociados a la ejecución de sus tareas en la empresa.
Es decir: toda condición laboral que afecte directa o indirectamente a los trabajadores, ya sea para bien o para mal.
Todo es una condición de trabajo
Solo por enumerar algunas, pero a su vez sentar una base de lo que estamos hablando, estás son algunas de las principales condiciones de trabajo:
- Salario y demás beneficios económicos.
- Beneficios sociales.
- Conciliación entre vida profesional y vida personal.
- Ambiente laboral.
- Entorno y herramientas de trabajo.
- Seguridad laboral.
- Posibilidades de desarrollo profesional.
Y un largo, largo etcétera.
Por supuesto, cuando un trabajador entra a una organización, la mayoría de las condiciones de trabajo ya están dadas.
¿Quién determina las condiciones laborales de los trabajadores? ¿Cómo se pueden introducir cambios que mejoren la calidad de estas condiciones? Vamos a ello.
¿Quién determina las condiciones de trabajo en las organizaciones?
Las condiciones de trabajo son las que se establecen por contrato, de común acuerdo entre la empresa y el trabajador, así como las que prevé el convenio colectivo (en caso de que haya uno).
A su vez, las condiciones de trabajo en España están reguladas por el Estatuto de los Trabajadores. En especial, como veremos, es importante prestar atención al artículo 41, que hace referencia a las modificaciones.
Una última instancia que regula, a grandes rasgos, las condiciones de trabajo en todo el mundo, es la Organización Internacional del Trabajo. Aunque en la práctica lo hace más a modo de guía para los estados que asistiendo directamente a los trabajadores.
Puede que seas tú
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Lo que buscan los trabajadores españoles en el 2022, en números
Las tendencias laborales en España emulan a las del resto de sus vecinos europeos y la realidad es innegable: los trabajadores españoles exigen mejores condiciones de trabajo.
Lo interesante es que esto no significa (al menos, no siempre) mejores salarios.
Según el informe anual de Randstad, presentado en mayo de este año, el 65% de los trabajadores españoles valoran la conciliación profesional y personal como el factor principal a la hora de elegir un lugar de trabajo.
Este fue el segundo factor más elegido, precedido únicamente por el salario y los beneficios atractivos (68%) y seguido de un ambiente de trabajo agradable (62%).
La guía del mercado laboral 2022 de Hays arroja todavía más luz sobre el asunto: el 73% de los trabajadores españoles preferiría contar con mayor flexibilidad horaria y al mismo porcentaje le gustaría poder trabajar en remoto.
Los últimos números (que, igual, hay para entretenerse un buen rato): el 43% de los encuestados afirman haber sufrido agotamiento o burnout en el 2022, y de estos el 37% culpa al ambiente de trabajo tóxico, y el 32%, directamente, a la falta de políticas de apoyo por parte del área de recursos humanos.
Lo que nos lleva a la siguiente pregunta.
¿Por qué deberían importarte las condiciones de trabajo?
En principio, porque la influencia que tienen las condiciones de trabajo en la calidad de vida y en la productividad de las personas; pero, también, por una cuestión llamada fuga de talentos.
Según el informe de Hays, el 22% de los encuestados aseguró haber renunciado a su trabajo sin tener otro pactado, y de este grupo, el 27% lo hizo por experimentar malas condiciones laborales.
En pocas palabras, el término fuga de talentos, en el ámbito empresarial, refiere a la perdida de capital humano, de empleados cualificados que se van de una empresa a otra en busca de mejores condiciones de trabajo, así sea en relación a los salarios y los beneficios o a las posibilidades de capacitación y de desarrollo profesional (o ambas, o cualquier otra).
Y es un problema cada vez más grande, cuyas consecuencias aún no hemos empezado (siquiera) a percibir.
La pregunta que se plantean las organizaciones, sobre todo en sectores con alto nivel de especialización, como puede ser el tecnológico o el financiero, es cómo retener a sus mejores empleados, cómo evitar que cambien de equipo a mitad del partido.
Las oportunidades, o cómo evitar la fuga de talentos
Como diría Vito Corleone en El Padrino: hazle una oferta que no pueda rechazar.
Hablando en serio, la mejor manera de evitar la fuga de talentos es, simplemente, ofreciendo unas condiciones de trabajo tan competitivas, que los empleados no encuentren razones para dejar la empresa.
Desde este punto de vista, podemos entender a las condiciones de trabajo como una serie de herramientas de fidelización laboral, y como una cuestión de estándar.
Por ejemplo: si todas las empresas de tu sector ofrecen una capacitación anual gratuita a sus empleados, tus empleados esperarán que tu empresa, como mínimo, haga lo mismo.
De hecho, el 41% de los trabajadores españoles no recibe ningún tipo de formación profesional por parte de su empresa, y este tipo de cuestiones pueden ser una gran oportunidad.
No se trata solo de retener al personal
¿Por qué mejorar las condiciones de trabajo es una oportunidad para las organizaciones?
Porque las condiciones de trabajo pueden convertirse en una ventaja competitiva cuando se trata de atraer a los mejores profesionales del sector.
Mejorar las condiciones de trabajo no solo te ayudará a mantener a tus empleados actuales, sino que también a atraer, potencialmente, a nuevos talentos que aporten más valor a la empresa.
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- Control horario
- Gestión de las vacaciones
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El peso de las modificaciones
En España, está claro que hay mucho por hacer en cuanto a condiciones de trabajo.
Para las empresas será cada vez más importante garantizar a sus empleados mayores flexibilidades laborales, tanto en cuanto al horario como a la presencialidad, así como toda una serie de beneficios sociales y salariales.
Pero, al contrario de lo que dicta la tendencia global, en España se han producido estos cambios con respecto al 2021:
- Un 13% menos de empleados tienen la posibilidad de teletrabajar.
- Un 7% menos siente que tiene potencial de crecimiento profesional.
- Un 14% más cree que su salario no es acorde a su empleo.
Las modificaciones sustanciales en la empresa
Cuando hablamos de modificaciones en las condiciones laborales nos referimos a cambios en una o más condiciones que afecten, positiva o negativamente, al trabajador.
Estas modificaciones pueden introducirse por un sinfín de razones, desde necesidades de la organización o exigencias de los empresarios hasta por negociación directa con el trabajador (modificación del contrato) o con los representantes de los empleados o sindicatos (modificación del convenio colectivo).
El rol de la ley
Es importante saber que las modificaciones sustanciales en las condiciones de trabajo de los empleados están reguladas, en gran medida, por el Estatuto de los Trabajadores.
En él se define toda una serie de requisitos para introducir estos cambios y, si hubiera que resumirlo, podríamos decir, simplemente, que no se puede modificar una condición laboral unilateralmente.
Es decir, las condiciones laborales se deberían modificar siempre a partir de la aceptación de todas las partes involucradas.
Los aspectos más demandados: el balance y la salud
Además de empujar a los seres humanos en dirección al teletrabajo, la pandemia de Covid también puso algo más en el centro de todas las miradas: las cuestiones relacionadas con la salud.
Hoy en día, una encuesta tras otra define que el balance entre la vida laboral y la vida personal, también llamado conciliación, es la prestación más importante para las personas a la hora de buscar un nuevo trabajo y, también, de quedarse en el que están.
Lo que sigue en las condiciones de trabajo
En definitiva, podemos decir que tanto en el presente como en el futuro, serán las características de las condiciones laborales las que pesen más, tanto el desempeño diario de las organizaciones, como en la decisión de los empleados de quedarse en su trabajo, o de irse.
Los riesgos de pasar por alto el análisis constante, tanto de los componentes propios como de los ajenos es grande: además de la fuga de talentos, la propia productividad de la compañía se puede perjudicar.
Mejorar el ambiente laboral también ayudará, en algunas industrias, a reducir los riesgos de accidentes o, al menos, a mejorar la gestión de riesgos y la forma en que se desarrolla la actividad en el día a día.
Entonces: ¿Qué sigue? Lo que sigue es estudiar el estado actual de las cosas para determinar si se da el caso de que haya espacio para la mejora, si se encuentran factores sobre los que trabajar para mejorar la situación de los compañeros, el estado de su trabajo y el carácter de su compromiso con la compañía.
Al final, es fundamental entender que tanto el empresario como los empleados persiguen el mismo objetivo: el crecimiento (empresarial, profesional) saludable.
